domingo, 1 de junio de 2014




Ferran García Laviña, expone en Periferiart, Lleida (30 Mayo 2014)



 Antes de empezar, y para situar el tema, quiero recordar unas frases que corresponde a una filósofa y a dos artistas.

José G. Ramos, 2014
 María Zambrano dice que <<el arte es un medio de conocimiento y de revelación>>. Manel Viola da un paso más y  afirma que <<el objetivo final del arte es enseñar los tejidos internos del alma>>; y por último Paul Klee nos recuerda que <<el arte no reproduce lo que es visible, sino que hace visible lo que no siempre lo es>>. 
José G. Ramos, 2014
 Una vez aceptado el encargo de la presentación de la obra de García Laviña, se me planteó cómo hacerlo.

José G. Ramos, 2014
Normalmente, tratar de explicar el cómo, entraña la misma dificultad que explicar el qué. 
José G. Ramos, 2014
En arte, en ocasiones, es en el método, en la manera de hacer, donde se encuentran las claves para descubrir los contenidos y significados de la obra.  
José G. Ramos, 2014

En el proceso de búsqueda se estudia el entorno además de los soportes y  materiales, escogiendo los que más se adecuan para reflejar lo que desea expresar el artista.

José G. Ramos, 2014 
De esta manera, queda reflejado en la técnica utilizada por Laviña, sobretodo, en los primeros cuadros de esta serie, en los que el soporte es el cristal, sobre los que aplica el color, tanto por delante como por detrás. Busca y rebusca entre los pliegues del alma, yendo en todas las direcciones, descubriendo nuevos espacios y nuevos horizontes.  
José G. Ramos, 2014

Parece evidente que, Ferran, << no reproduce lo que es visible, sino que hace visible lo que no siempre lo es >> y cumple con <<el objetivo final del arte es enseñar los tejidos internos del alma >>, siendo éste, el arte, <<un medio de conocimiento y de revelación >>.     

Debo pediros disculpas por la calidad de las fotografías, no soy fotógrafo.
             







viernes, 30 de mayo de 2014


Fernando García Laviña



No creo que sea necesaria mayor explicación  para decir que otro de mis amigos expone en Lleida. 


Nos vemos en la galería. Suerte.


sábado, 26 de abril de 2014





Graffiti en Valencia

José G. Ramos, 2010-1. Graffiti. Valencia
El problema de la documentación es que se ha de guardar con un orden y éste se ha de mantener a lo largo del tiempo con sus códigos y formulaciones. 
José G. Ramos, 2010-2. Graffiti. Valencia
Cuando no se hace así y, este orden, se va variando  de forma, a veces imperceptible, con el paso del tiempo, se hace difícil recuperar el documento.
José G. Ramos, 2011-1. Graffiti. Valencia
Algo así le comentaba a S..., el grafitero, y esto fue lo que me sucedió a mi cuando buscaba estas imágenes.
José G. Ramos, 2011-2. Graffiti. Valencia
A medida que he ido vianjado estos últimos años, he hecho múltiples fotografías que he ido guardando en un orden que, sin darme cuenta, ha ido variando, poco a poco.
José G. Ramos, 2012-1. Graffiti. Valencia
La localización y recuperación posterior, dada esta circunstancia, se me ha hecho más lenta y compleja, pero gracias a mi memoria lo he logrado.
José G. Ramos, 2012-2. Graffiti. Valencia
El tema, al estar dedicado a S...,y, evidentemente, a todos vosotros, no podía ser otro que el del graffiti y sus diferencias en función de las ciudades en que se concibieron y realizaron y cómo fueron variando con el paso del tiempo.
José G. Ramos, 2012-3. Graffiti. Valencia
La ciudad que visitaremos hoy a través del gaffiti será Valencia.



sábado, 12 de abril de 2014


Graffiti de Lisboa


Queda claro que un graffiti es un graffiti, pero no todos los grafitfis son iguales o como podriamos suponer muy parecidos entre sí. Hay diferencias y no solamente técnicas.
José G. Ramos, 2011. Graffiti. Lisboa.
En la realización de una obra, cualquiera que sea, influyen múltiples elementos y circunstancias que van desde la inteligencia del que la diseña y realiza la obra, hasta los materiales  que se utilizan, pasando por la formación conseguida en el momento de hacerla.
José G. Ramos, 2011. Graffiti. Lisboa.
Así podemos ver, en uno de los graffitis de Venecia (el que queda reflejado en la primera imagen de dicha entrada,  hecha con lápiz), como el grafitero muestra el entorno en donde hace su obra.
José G. Ramos, 2011. Graffiti. Lisboa.
En las fotos de los graffitis que hice en Lisboa (2011), seguramente como consecuencia del momento económico que se vivía,y no niego que tal vez por historia, el tema de los mismos, era de caracter más revindicativo.

José G. Ramos, 2011. Graffiti. Lisboa










Graffitis de Venecia


S... es un grafitero de Lleida, que hace poco, para mi sorpresa, conocí como tal. Hablando con él, le dije que en mi blog (éste) tenía una página, dedicada a unos graffitis que fotografié en mi último viaje (octubre de 2013).
Graffiti. Venecia, Octubre de 2013.
Ayer entré en el blog en busca dichos graffitis y me encontré con la sorpresa que habían desaparecido. 
Graffiti. Venecia, Octubre de 2013.
Lo que debió ocurrir fue, que teniendo intención de dedicar una entrada al tema, lo dí por hecho y me olvidé.Cumplo hoy el compromiso adquirido con S...
Graffti. Venecia, Octubre de 2013.
Quiero destacar, antes de cerrar esta entrada, el hecho de que por dónde estuvimos paseando (y andar anduvimos) en esos diez días, éstos que os presento hoy fueron los únicos que encontramos. 
Graffiti. Venecia, Octubre de 2013.
Las paredes, muros y suelos de Venecía apenas tenían graffitis. 
Graffiti en el suelo. Venecia, Octubre de 2013.


viernes, 14 de febrero de 2014



En la búsqueda de los orígenes


En la búsqueda de los orígenes que se me provocó al preparar mi última entrada (la anterior a ésta), dí con unas imágenes confeccionadas en el año 1982 que me llamaron la atención y me propuse compartirlas con vosotros. 
José G. Ramos, 1982. Sin título-1. Guaix sobre papel (25x17,5) 

Estas piezas, hoy en día, después de sufrir un sinfín de avatares (cambios de estudio y de ciudad) forman un conjunto de 8 piezas realizadas con el mismo soporte y la misma técnica.
José G. Ramos, 1982. Sin título-5. Guaix sobre papel (17,8x25,4) 

Tengo el convencimiento que el trabajo que hice en aquel momento era más extenso.
José G. Ramos, 1982. Sin título-6. Guaix sobre papel 

A decir verdad alguna parte de ese trabajo pueden estar en alguna caja que no abrí o que tiré después del último traslado.

Hablando con un amigo


Hace unos días vino a visitarme un amigo y la conversación recayó, casi de forma inevitable, sobre la creación pictórica. En estas conversaciones, que no tienen ánimo autobiográfico, sino de búsqueda, intentamos profundizar en el tema haciéndonos preguntas: ¿cómo se produce?, ¿en qué se fundamenta?, ¿cuales son las raíces del trabajo que estamos haciendo?...
José G. Ramos, 1975. La Vall Fosca (Lleida). Ceras sobre papel.
En la ocasión que apunto, cada uno aportó su experiencia personal y ambos coincidimos en que las fuentes de nuestro trabajo son múltiples (todos tenemos padre y madre, y, a veces, hasta parientes lejanos), estos orígenes no tienen porque ser los mismos.
José G. Ramos, 1975. La Vall Fosca (Lleida). Ceras sobre papel.
Yo, hace años, tomé conciencia que parte de mi trabajo arranca del estudio emocional del paisaje (en lo macro y en lo micro).  Hecha, una vez más, esta afirmación, acudí al ordenador donde guardo la documentación fotográfica de  parte de mi obra y llegué al año 1975, del que extraje estas tres piezas que os muestro hoy.
José G. Ramos, 1975. Carretera entre Central de Capdella y Espui  (Lleida). Ceras sobre papel.
Considero interesante contrastar estas imágenes de hoy, comparándolas con las de la entrada: Árboles y paisajes del 31 de Agosto de 2013.

viernes, 3 de enero de 2014



Pinceladas



Ya sabéis que el orden, ajustado a la función que se desea conseguir, es necesario para la realización y desarrollo de la misma.

Llevado de este principio, en ocasiones, reorganizo una parte o la totalidad del estudio, según me sea necesario. Al mover objetos, papeles y demás, aparecen cosas que fueron abandonadas en los recodos del tiempo y, que me reencuentro después de algunos años, que me habían desaparecido de la memoria consciente. 
José G. Ramos, 1993. Pinceladas-29. Acrílico sobre cartón. 10,3 x 9,3 cm
Esto es lo que me sucedió hace cosa de un mes, antes que finiquitase el 2013. 
José G. Ramos, 1994. Pinceladas-133. Acrílico sobre papel. 24,9 x 17,2 cm

En la parte de izquierda de una de las mesas que tengo en el estudio, al retirar unos papeles, me apareció un pequeño tesoro. Encontré el trabajo que correspondía a la investigación sistemática, que desde entonces acá, ha definido e identifica mi pintura: la pincelada, como concreción del gesto.
José G. Ramos, 1995. Pinceladas-149. Acrílico sobre papel. 25,2 x 17,7 cm

Este trabajo metódico desembocaría en una muestra que expuse, por primera vez en Xoc, en Barcelona, en el año 1996.
José G. Ramos, 1996. Pinceladas-203. Acrílico sobre papel fotográfico. 21,5 x 15,3 cm